lunes, 20 de abril de 2009

Hints that tell me that spring time is around


Cada año se repiten una serie de pistas que me informan de que la primavera ha llegado. Una de ellas, son los almendros que florecen tempranamente a finales de Febrero principios de Marzo, otra, que los días son más largos y paseo más y la tercera y definitiva es que mi amiga C. el día 19 de marzo sin falta saca su sempiterno traje de marinerito. No falla, por esas alturas del año el conjunto de pantalón blanco y chaqueta blazer color azul oscuro hace su aparición en cualquier contexto social, ya sea un cine, una cena o quedar para cocerse con margaritas (da igual, su dueña se arrastraría calle abajo cocida hasta las trancas, con su pantaloncito blanco si fuera necesario).

Miren, ese conjunto anunciador de la primavera, es un clásico en nuestras vidas. Es como el chupinazo en los San Fermines o la Mascletá en las Fallas. En cuanto aparece el pantaloncito blanco en alguna reunión, el mensaje está claro: Vía libre para sacar la chancla.

Curiosamente el 19 de marzo de este año el tandem, blazer y pantaloncito blanco, no ha aparecido. Que no hicieran acto de aparición en Marzo, nos ha parecido, cuanto menos sospechoso, dado que hemos disfrutado de una primavera temprana. Ahora en Abril, con el frío que hemos pasado no tiene sentido, porque recogeríamos a su dueña C. convertida en estalactita en cualquier esquina, muy mona si, pero prácticamente amputable en su totalidad y eso sería una lástima, porque tendríamos que adaptarle el traje de marinerito, para las siguientes temporadas, y habría que meter mucho de sisa. Un engorro, vamos.

Yo le pregunté hace unos días el porqué. Es importante saberlo, dado que sin ese traje el resto hemos perdido orientación primaveral, y vivimos en un ir y venir de jerseys, botas, chanclas, blusas, camisetas, todo en melé que es una agonía.

C. no me ha dado una respuesta clara, directa y concisa, pero si que me ha hablado de la necesidad de comprarse una fajita reductora. Yo que esperaba que marinerito se hubiera apolillado después de tantos lustros, y hete aquí que el problema no es ese, sino que corremos serio peligro de perderle por someterlo a presiones cárnicas de última hora.

Para calmarla, yo le he dicho que yo estoy en las mismas con todos mis clásicos primaverales. Pero que en mi caso, más que una fajita reductora necesito un tubo corporal compresor que someta mi cuerpo a varias nano presiones controladas por la NASA, que puede que me haga más efecto. En cualquier caso, le he dicho que no se preocupe, que estamos estupendas y así nos lo hacen ver, y que como diría, groseramente, el padre de Mark Darcy en el Diario de Bridget Jones, "Las mujeres deben de tener un culo donde uno pueda aparcar una bici y apoyar una cerveza".

Bueno en los nuestros hasta podrían apoyar las aceitunitas que acompañan como aperitivo y echar una partidita de póquer.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola!
Yo tambien he echado de menos esta primavera el traje de marinerito. Era el pistoletazo de salida de la nueva temporada junto con el anuncio de El Corte Ingles...Si su puesta unicamente depende de una fajita, por favor adquierela
Bss
V.