Pues si, queridas mías. Me he comprado los zapatos de cordones dorados de Zara que he visto que nadie compra en ninguna de las tiendas. Creo que hasta la encargada de la tienda ha venido a saludarme como primera compradora de tan discretos zapatos. A mi me rechiflan. Me los planto con unos vaqueros azul oscuro, un jersey gris, un foulard que me enrollo hasta el cerebelo, y mi abrigo gris. Parezco propiamente una mezcla confusa de James Dean y Priscilla la reina del desierto.
Es como llevar dos placas foto voltaicas encima. Si miro hacía abajo, me veo hasta la papada reflejada en su maravillosa superficie dorada. Estoy por llamar a Unión Fenosa, para que me contraten como generadora de electricidad por energía solar. Si no recuerdo tienen un contrato de servicio, la mar de interesantón.
2 comentarios:
Siempre te he dicho Amelie que brillas con luz propia y ahora con estos zapatos hechos del material de las bolas de navidad pues mas.
¿Ha caido tambieen el bolso?
A mi me parecen super fashion, creo que también sirven para bailar claqué...;-)
Publicar un comentario