domingo, 20 de diciembre de 2009

A scent of a mood




Todavía no salgo de mi asombro. He leído en a Cup of Jo, uno de mis blogs favoritos, que ha salido un perfume inspirado en la pelicula A Room with a View. Para los que me conocen mucho, pero muy mucho, saben lo que esto significa para mi. Yo a los catorce años vi por primera vez esta película y no he dejado de verla desde entonces. Puedo recitar el guión completo frase por frase de carrerilla, con esto lo digo todo.

Yo he sido mas rara que un perro verde desde niña y esta película ayudó sobradamente a que mis rarezas acabaran de tomar forma. Cuando las niñas de quince años soñaban con ser Claudia Schiffer, yo soñaba con ser Lucy Honeychurch la siempre contenida protagonista de esta película. Y si por aquel entonces los chicos de moda eran los Hombres G (ando que no soy vieja ni nada), a mi estos tíos ni plin del peluquín, lo mío era el co-protagonista masculino de Una Habitación con vistas: George Emerson, el chico callado, introspectivo y nihilista que le recuerda a a la protagonista que si llevara el corsé un poco más holgado y le eligiera finalmente a él como compañero, posiblemente ella sería más fiel a si misma.

Con estos credenciales, como para ligar en las discotecas estaba yo.

Ahora que han sacado este perfume que dicen inspirado en la escena del beso de los protagonistas en un campo de amapolas en San Giminiano, me pregunto si habrán podido captar en el aroma todos aquellos detalles que enmarcan la escena: La música del Oh mio Babbino Caro de Puccini, el fru fru de la tela de organza del traje de Lucy, el sol de una primavera temprana, el tacto de la chaqueta de lino de George, la impetuosidad del beso y la perplejidad de Lucy.

Sino es así, no me vale.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Amelie ¿se puede ser más cursi? Lo estoy dudando, pero creo que no.

Dori´s place dijo...

Lo se querida mía, pero es que a room with a view saca la freak q llevo muy dentro.

Muacketas!